Hay que ser uno con las cosas como son, cultivar el estar totalmente presentes y dejar de estar atrapados por nuestros pensamientos.
La red neuronal por defecto no resuelve los problemas sólo los agranda ya que sólo repite los asuntos no resueltos.
La mente es nuestro más valioso y precioso recurso a través del cual experimentamos la vida, ella nos hace estar felices, satisfechos y no solemos dedicar ningún tiempo para cuidarla, el resultado es una mente desentrenada y fuera de control, con pensamientos y emociones que nos agobian, nos hace sentir tan mal que no estamos presentes en el mundo en el que vivimos. El 47% del tiempo que estamos pensando la mente está vagabundeando por lo tanto nos perdemos media vida.
El asunto no consiste en eliminar los pensamientos sino en observarlos en un estado de relajación enfocada sin quedar atrapados por ellos.
Observa los pensamientos y emociones y vuelve a la respiración, con esto estás practicando la aceptación de cada momento tal como es sin reaccionar a como es, tu mente se vuelve menos reactiva y más estable. Trabajando con la resistencia de tu mente aumenta tu fuerza interior, no te detienes en los pensamientos sino los observas. Dedica unos minutos tres veces al día a hacer esto.
GOBIERNA TU PROPIA MENTE
Todos podemos modular nuestros estados de ánimo, regular nuestras emociones y situar nuestro cerebro en alto rendimiento. Gran parte del sufrimiento humano es debido a nuestra propia creación, cuando aprendes a no identificarte con tus pensamientos o emociones y los dejas ir el sufrimiento disminuye.
La mente es por naturaleza inestable pero la atención gana a los pensamientos cuando puedes ser consciente de ellos.
Las emociones dolorosas surgen más de las creencias que de la realidad misma. Hay que cambiar la relación con las emociones más que intentar eliminarlas. Observando tu mente creas un tablero de control que te ayuda a ver como te tiraniza y te permite escoger no ser esclavizado. La habilidad de observar tu mente te permite ver la de otras personas.
El sufrimiento viene de la identificación con pensamientos y emociones por eso es tan importante observarlos.
La consciencia te devuelve a la vida, está abierto a todo lo que se presente, sólo mediante la aceptación de la realidad actual por dolorosa e indeseable que sea puede darse el cambio, la madurez y la sanación.
Si podemos distinguir entre la situación problemática y las emociones que me producen podremos centrarnos mejor en resolver el problema, si los confundimos se genera más dolor y sufrimiento. Intenta resolver el problema, escucha a tu intuición, a tu corazón y confía en ellos, si no puedes hacer nada concéntrate en la respiración.
Indaga que tipo de pensamientos y emociones te asaltan, acéptalos, debátelos racionalmente, habla con ellos. Pensamientos y emociones son eficaces para responder a las circunstancias amenazadoras. Considera los problemas como retos, piensa que otros están peor.
Trátate con amabilidad cuando las cosas vayan mal, acepta lo que hay pero niégate a los pensamientos negativos y reiterativos.Los problemas y dificultades son nuestro gimnasio para practicar, tenemos que ser amables con nosotros y no reaccionar mecánicamente ante las cosas.
Haz lo que tengas que hacer pero sin quedarte atascado en la emoción.
Los pensamientos sobre algo espantoso que nos ocurrirá produce desesperación y pérdida de control sobre la mente. Atiende a los asuntos de alta probabilidad que sucedan, sólo porque la situación sea posible no tengo por que centrar mi atención en ello.
Sé consciente de que no somos nuestros pensamientos ni nuestros sentimientos, que no tenemos que creer en ellos ni reaccionar ni ser controlados por ellos, contémplalos como olas que se levantan y deshacen. Son sucesos en el campo de nuestra consciencia.
Son los pensamientos los que producen las emociones, observa que los que tienen un alto contenido emocional tienden a repetirse una y otra vez y pueden arrastrar a la mente. Cuando los vemos como simples pensamientos y no reaccionamos se desvanecen. A mayor carga emocional de un pensamiento más probable es que capture nuestra atención y nos aleje del momento presente. Nuestra tarea es ver y dejar pasar una y otra vez.
La mente queda constantemente atrapada por los deseos y aversiones con lo que nuestra vida se convierte en una montaña rusa. Cuando damos un paso atrás y vemos que no somos nuestros pensamientos y emociones, que no tenemos que creer en ellos y que generalmente son inexactos, poco objetivos y coloreados por los deseos y los miedos, habremos encontrado la clave para mantener el equilibrio ya que veremos que el miedo es un estado mental y observándolo, aceptándolo y soltándolo, podemos cambiarlo.
Al problema se suman los pensamientos negativos sobre el problema.... las cosas son malas para que yo las ponga peor con mis pensamientos.
Uno de los signos de nuestro progreso es darnos cuenta del caos que hay en la mente.
Relaja la lengua, llena de saliva tu boca, parpadea unas cuantas veces y haz que esa relajación que sientes baje por todo tu cuerpo, el cuello, hombros y cara. Libera cualquier tensión que haya en la zona hasta los pies, permanece sin moverte y atento.
Concéntrate en la respiración y en cada exhalación suelta las tensiones y los pensamientos. Relájate en cada exhalación y observa pasar los pensamientos, si no puedes concéntrate en lo que llamamos anclas: La postura corporal, los ruidos de la calle, las sensaciones del cuerpo.... y desde allí observa los pensamientos pasar.
Las anclas sirven para reducir la red neuronal por defecto ya que cuando concentro mi atención en algo los procesos automáticos de pensamiento se detienen.
No intentamos eliminar los pensamientos sino relajarnos y prestar atención a la respiración, tomamos nota de los pensamientos, las emociones y los soltamos. Mientras más relajados estemos más estable puede llegar a ser nuestra atención. La relajación debe equilibrarse con el estado de alerta. Si te duermes concéntrate en la inspiración, si estás nervioso te concentras en las fosas nasales durante la espiración. Es bueno hacer islas de relajación durante el día.
Tenemos que distinguir lo que estamos percibiendo por nuestros sentidos de lo que está añadiendo la mente.
Sufrimos porque nuestra mente está afectada por desequilibrios que nos hacen buscar la felicidad en los lugares equivocados. Para progresar a niveles más profundos tienes que ser consciente si tienes que avivar la atención o la relajación, si te sientes nervioso relájate en cada exhalación, si estás adormecido aviva tu atención concentrándote en las fosas nasales al inspirar. La meditación no es relajación, es abrazar cualquier estado de la mente con atención plena.
La frustración, ansiedad y tensión son iguales de valiosos para entrenar la mente cada una nos sirve para aprender y liberarnos, no son señales de que nuestra meditación no esté funcionando porque no estemos relajados o felices en ese preciso momento.
La observación de los fenómenos físicos y mentales es una forma de relacionarnos con las circunstancias, es estar presentes sin identificarnos con lo que ocurre aceptando todo lo que sucede sin reaccionar. La mente suele resistirse a aceptar lo que es. Cualquier estado de la mente nos puede servir para meditar: Ira, tristeza, miedo confusión, todos ellos nos sirven para conocernos más a nosotros mismos.
problema surge cuando sobredimensionamos el pensamiento excluyendo a otras partes de nuestro ser e identificamos el yo con la mente pensante quedándomos atrapados en nuestros pensamientos. Hay que poner al pensamiento en el lugar adecuado en el esquema de las cosas, la mayoría de nuestros pensamientos no se originan en el cerebro racional sino en el cerebro primitivo.
El pensamiento es una herramienta pero solo eso, es el sexto sentido y al igual que los otros cinco sentidos sirve para garantizar nuestra supervivencia. Esto nos ayuda a desmitificar y a despersonalizar el proceso con lo que ganamos libertad, ya que no necesitamos creer o dejarnos llevar por cada uno de los pensamientos que aparecen. Cuando observamos los pensamientos nos damos cuenta de que son mucho más inciertos de lo que parecen aunque normalmente los creemos.
La mayor parte de nuestro sufrimiento mental viene de creer que nuestros pensamientos son verdad, entonces se convierten en creencias.
La mente pensante construye sus puntos de vista sobre lo que es bueno y lo que es malo. La mente es tu amiga ya que puede ayudarte más que nada en el mundo cuando está entrenada y cuando no lo está es un enemigo que te tiraniza. Nadie puede hacerte más daño que tu mente sin domar. El río de los pensamientos no está bajo nuestro control, la mayor parte del río se compone de repeticiones en general de sucesos negativos que han ocurrido y que pueden ocurrir.
La observación de tu mente te enseña que mucho de lo que crees es producto de tu imaginación: Voces del pasado, normas de tus padres, el niño no amado...
La mente se tiñe del color de tus pensamientos, cuando los observas, dejas de tomarlos en serio; das un paso atrás, los miras y decides si son verdad o no, si te benefician o perjudican. Necesitas los pensamientos para planificar el futuro y resolver problemas pero el 90% no te sirven. Solo porque tengas pensamientos no tienes porque creerlos y dejarte atrapar, cuando regreses a la consciencia más allá de los pensamientos experimentarás la verdadera sanación interior. Los pensamientos no son la realidad sino una interpretación que hacemos de ella, no tienen por que ser verdaderos.
Cada vez que tus pensamientos te agobien contempla el esquema general de la vida, a lo mejor lo que te sucede es algo normal en ese marco y es algo que ocurre a todo el mundo. Cultiva la atención en las tareas cotidianas.
La mente se distrae por el ruído y las emociones negativas como el miedo. La continuidad de la atención está determinada por los deseos y miedos pero una mente gobernada por los deseos y aversiones es presa de la ansiedad e intranquilidad.
Ten pocos deseos, siente contento y gratitud, mantén pocas actividades durante el día, controla los pensamientos errantes.Tu objetivo es vivir y no simplemente existir.
Los pensamientos son como burbujas de jabón no necesitas hacer nada con ellos, ya se irán, tú no eres tus pensamientos. Con la observación te entrenas en dejar que las cosas sean. Cuando estamos dentro de nuestros pensamientos, es decir cuando nos identificamos con ellos nuestro mundo se nubla.
LA MENTE ES UN BUEN SIRVIENTE PERO UN MAL AMO
Tendemos a confundirlos con la realidad. Etiquetarlos hace que se debiliten: “Planificando, juzgando, miedo,duda, fantaseando, suponiendo, enfermedad....” Todos tenemos nuestros pensamientos negativos preferidos.
Sé amigable con lo que ocurra, no luches y déjalo ir, céntrate en las sensaciones corporales y los sonidos del exterior.
Cuando nos identificamos con nuestros pensamientos estamos viviendo en una realidad virtual.
Nota la diferencia ente tus pensamientos y lo que está a tu alrededor.
Haz una pausa cada hora o al comenzar las actividades y empieza a preguntarte ¿Qué es lo que está pasando en este instante? ¿Qué está reclamando mi atención, que me está diciendo mi cuerpo y mi mente, a que me estoy aferrando ?
La sonrisa significa aceptación. Di sí a todo lo que no puedas controlar. Sonreír cambia la mente. Donde hay apego hay miedo, si piensas que tarde o temprano vas a perder eso te tranquilizarás.
Experimenta la bondad de la aceptación y no la amargura de la resistencia
No hay forma de escapar de nada, las cosas nos persiguen, creemos que si cambiamos de lugar y circunstancias nuestra vida cambiará pero adonde vayamos nuestra mente va con nosotros. No podemos escapar de nosotros mismos, la única alternativa es la transformación, debemos dejar que la vida se convierta en nuestro maestro. El camino consiste en trabajar donde estemos, con lo que nos encontramos aquí y ahora, por muy desalentadoras y desagradables que puedan ser las circunstancias. El problema está en la mente, así que mientras no la cambiemos no vamos a estar bien en ningún sitio. ¿Por qué las cosas van a ser mejores en otro lugar? Seguro que tendrás otros problemas, tarde o temprano saldrán los mismos asuntos porque se originan en nuestra forma de ser, de ver y de comportarnos.Tenemos que transformarnos con lo que hay aquí y ahora.
Avanzamos en la medida que nos liberamos del yo, del mi y del mío.
Lo importante es ver las cosas como son sin las distorsiones de nuestro proceso de pensamiento. Tenemos que tomarnos las cosas de modo no personal, ver el esquema más grande de lo que está sucediendo puntualmente.
Si basamos nuestra felicidad en influir en otras personas o el mundo en general entonces estamos abocados al fracaso
El mundo exterior es una descripción basada en procesos que tienen lugar en nuestro interior. Para ver donde estás, donde te lleva tu mente, contempla las suposiciones que haces acerca de la realidad y busca mejores opciones. Parar es la herramienta de todas las herramientas
TONO AFECTIVO
Afecto es el acto de etiquetar las sensaciones como agradables o desagradables. El afecto va más allá de las sensaciones, nos hace creer que las cosas son positivas o negativas, aunque no somos conscientes de este proceso ya que se produce muy rápido pero si lo observamos detenidamente, no respondemos automáticamente creando una emoción, con lo que no se produce una oscilación del estado de ánimo.
La secuencia sería la siguiente:
Cuando experimento algo ya sea físico o mental si lo considero agradable lo clasifico como una sensación positiva y genero una emoción positiva , quiero repetirla (apego). Si la sensación la catalogo como desagradable genero una emoción negativa y quiero evitarla .
El tono afectivo puede clasificarse desde muy agradable a muy desagradable con graduaciones intermedias.
La manera en que reaccionamos depende del tono afectivo que le doy al suceso ya que la emoción que produce hace que actúe de una manera u otra.
No estés apegado al tono afectivo: Si lo que experimentas es agradable, te gusta, lo aceptas, si no es agradable, no te gusta pero también lo aceptas. Llevando a cabo esto haces que el pensamiento que tienes sobre lo que te está sucediendo no genere ninguna emoción negativa.
El tono afectivo consiste en reconocer, permitir, es decir, aceptar y ver que no hay que reaccionar ante las sensaciones desagradables. Lo que siento es desagradable, no me gusta pero no es necesaria ninguna acción ahora...
En la vida diaria, observa el tono afectivo de todo lo que te sucede, acéptalo, no reacciones, habla con el, di que es normal que no te guste lo que ocurre pero eliges no reaccionar negativamente ante ello produciendo una emoción negativa .
Recapitula el día y etiqueta el tono afectivo de cada suceso.Cada hora comprueba como te sientes, como es tu tono afectivo.Acepto el tono afectivo para no reaccionar, para que no se produzca una emoción. El cerebro predice en función del tono afectivo, si es agradable o desagradable, el cerebro planea como actuar en función de él, perseguimos lo que nos gusta y evitamos y nos resistimos a lo que no nos gusta. No podemos hacer nada en contra del tono afectivo pero podemos actuar en vez de reaccionar, si hay espacio ente el tono afectivo y la reacción emocional podemos elegir no actuar con lo que la emoción no se desencadena automáticamente.
Tienes que ver el tono afectivo de los pensamientos y di: Es normal que me guste que las cosas sean diferentes pero no tengo por que reaccionar, observo y no actúo.
Si pones nombre a lo que sientes podrás manejarlo mejor. Las emociones son signos de que algo necesita nuestra atención, hay una necesidad no resuelta, les presto atención para ver si hay que hacer algo y las suelto, cuando se repiten constantemente nos agotan.
Cuando te sientas psicológicamente mal observa en que parte del cuerpo se refleja la emoción negativa que experimentas y nómbrala : Se llama miedo, por ejemplo, hablas con tu cerebro primitivo, le das las gracias y le dices que vas a hacer lo posible para resolver el problema y le invitas a marcharse, te despides con amabilidad y te concentras en los sonidos del exterior. Abre los ojos, después te encuentras más tranquilo aunque siga el pellizco en el estómago pero si no hay resistencia no hay reacción.
En un estado de relajacion se manejan mejor las emociones desagradables que tengas. Respira por donde está la emocion y relájate ya el miedo produce tensión.
La emocion es la construcción del significado de las sensaciones. El cerebro usa las experiencias pasadas para dar significado a las sensaciones actuales. La alegría, la tristeza, el miedo los construye el cerebro, las experiencias se crean por construcción, las emociones no están en nuestros genes. Las emociones no surgen del cuerpo o de una parte del cerebro sino que son construidas, no es un proceso automático somos los arquitectos de nuestras experiencias.
El cerebro hace una predicción de lo que sucede, el cerebro es un científico sin escrúpulos, ignora los datos y decide qué predicción es la realidad o elige los datos que confirmen su hipótesis o hace una simulación sin input sensorial. Sentimos lo que el cerebro cree. Vemos lo que el cerebro cree, es un realismo afectivo. Creer es sentir. La emoción es más compleja que el afecto y es construida por nuestra mente.
MEDITACION ANTES DE DORMIR
Observa el cuerpo. Respira por todo el cuerpo.
Si encontraste algo que haya sido desagradable di : Es normal que no me guste pero no voy a reaccionar.
Contempla las cosas agradables del día y mira como puedes tener más momentos agradables, que es lo que no te gustó del día y como puedes dedicar menos tiempo a cosas que no te gusta . Haz esto cada noche.
Imagina que enciendes la tv de tu mente, haz una respiración profunda y visualiza una línea numerada del uno al cien, es tu escala de tensión, toma consciencia del nivel de ansiedad en el que te encuentras, numéralo . Baja gradualmente ese número en la escala hasta que llegues a un nivel en el que te sientas cómodo y tranquilo. Haz la visualización de la escala cada vez que estés nervioso.
Visualiza diferentes escalas y regula la que no esté en equilibrio : Escala de alegría- escala de aceptación-escala de cansancio-escala de dolor-escala de gratitud-escala de miedo-escala de paz-escala de preocupación-escala de salud.
Pasamos mucho tiempo viviendo en nuestra cabeza y no vemos lo que pasa alrededor, vive en la realidad no en tu cabeza. Deja de vivir en tu cabeza y vive tu vida. Saber que podemos con todo lo que ocurra nos da seguridad y tranquilidad.
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